1)Profesor Carranza ¿Qué opina de todo el boom informativo sobre el llamado Año de Darwin?
En parte me parece lógico. En 2005 celebramos el año “milagroso” de Einstein. Creo que nuestra civilización es muy propensa a ensalzar a los héroes, y no está demás que junto a deportistas, cantantes, políticos y literatos se cuele de vez en cuando algún científico. Lo que no sé si es tan lógico es que la mitificación del héroe sea en todos los planos, queremos que el actor de Hollywood sea además un buen padre, solidario con los africanos pobres, etc. No hemos cambiado mucho respecto a la época de Ulises o Ariadna. En cuanto al caso concreto de Darwin, me parece que ni siquiera con Einstein o Newton se hicieron tantos esfuerzos de “divinización”.
En este caso hay además un enemigo al que combatir (creacionismo, diseño inteligente), lo que eleva a Darwin al equivalente de héroe griego o santo mártir cristiano. Y como con otros mitos, detrás de ellos hay gente poderosa interesada en su mitificación.
No olvidemos que la teoría darvinista no es solamente una teoría científica sin más, es una teoría que hunde sus raíces en visiones del mundo filosóficas y sociales consustanciales a la teoría. Es una teoría que trata de responder a las tres preguntas fundamentales que se lleva haciendo el ser humano desde que es tal: ¿De dónde venimos? ¿Quiénes somos? ¿A dónde vamos? Las mismas preguntas que se han hecho las filosofías y religiones del mundo. A nadie le dejan indiferentes.
2)¿Usted piensa que la relevancia y atención que la obra de Darwin cobrará este año en los medios científicos y de comunicación, fomentará un examen crítico de la obra de este autor, y propiciará la seria consideración de teorías científicas alternativas sobre la evolución?
La mayor parte de los esfuerzos no están yendo en la dirección del examen crítico de la obra del autor, sino en la dirección de ensalzarlo y de contraponerlo a las visiones acientíficas, no a otras visiones científicas. Pero también es cierto que algunos científicos y periodistas con buen espíritu de investigación tratan de profundizar realmente en la obra de Darwin y en el estado actual de la teoría (el neodarwinismo) y unos pocos de entre ellos quizás se molesten en revisar otras teorías científicas alternativas. El que se acerque a Darwin desde la historia de la ciencia dejará de mitificarlo fuera del ámbito científico (era un racista, machista, rico usurero… una persona que no aprobaría los valores mínimos de nuestra sociedad actual). Y el que se acerque a su obra científica se dará cuenta de lo lejos que está el Darwin histórico real del Darwin que nos venden los libros de texto escolares y científicos. La propia ciencia ha hecho un mito de su obra científica, lo cual dice poco a favor de cómo funciona ésta.
Si pensamos que parte del propósito de la celebración de Darwin es ensalzar una parte de la visión de Darwin, parece lógico que no debemos esperar que se propicie un debate con otras teorías científicas: ¡no vaya a ser que sean mejores!
3)Usted es el autor de la excelente obra "El origen de Gaia. Una teoría holista de la evolución", cuya lectura me parece imprescindible. ¿Puede explicarnos brevemente cuál es la idea central de su libro?
Veamos… La misma teoría que explicaría el origen, permanencia y evolución de Gaia, se aplicaría a la evolución de las especies. Lo que evoluciona en la superficie de la Tierra es Gaia, la evolución de las especies es un efecto colateral de la evolución del organismo principal que es la propia Gaia. Es Gaia de hecho la que hace evolucionar a sus partes que son los seres vivos y sus interrelaciones. Por evolución se entiende no solo transformación o cambio, sino desarrollo, crecimiento en complejidad. La teoría retoma la vieja idea de que en el universo existe una tendencia o ley hacia el aumento de la complejidad.
4)Se menciona mucho el concepto de Gaia; pero creo que esta idea no ha sido bien comprendida por muchas personas. ¿Podría explicarnos en qué consiste la noción de Gaia y por qué ella es relevante para la comprensión de la vida y la evolución?
Aquí he de mencionar que mi noción de Gaia no es la misma que la de Lovelock y sus seguidores, ellos ven a Gaia como un sistema complejo en el que intervienen los vivientes y que genera estados adecuados para la vida de los vivientes presentes. Otros incluso la ven como un sistema complejo que ni siquiera genera estados adecuados para la vida sino que los seres vivos simplemente se adaptan a las condiciones que crea el “sistema complejo”. Lovelock utiliza la idea de organismo aplicada a Gaia como una metáfora útil y visual, pero solo eso.
Mi visión es más radical y se retrotrae a visiones muy anteriores a James Lovelock: Gaia es un organismo, con propiedades y funciones similares a las de otros “sistemas” que llamamos organismos: una bacteria, una rana, un árbol, etc. Además, como tal organismo tiene fines y propósitos, es un “sistema” que los filósofos llaman teleológico (con telos, con finalidades).
En cuanto a porqué Gaia es relevante para la comprensión de la vida y de la evolución… pues porque si Gaia es el organismo que vive en este planeta y todos los seres vivos formamos parte de él, las propiedades, las observaciones, las funciones, los procesos de la vida y de la evolución en realidad son de Gaia; comprender a Gaia es comprender el fenómeno de la vida y de la evolución. Yo diría, parafraseando a un neodarwinista (Theodosius Dobzhansky): Nada tiene sentido en biología sin la luz de la evolución… de Gaia. Y a Lynn Margulis: la evolución… de lo complejo… es, simplemente, toda la historia. Y en la Tierra toda la historia es la historia de Gaia.
5)¿Está su teoría fundamentada en descubrimientos y datos científicos? Si es así, ¿puede mencionarnos algunos de ellos?
Por supuesto. Primero, trato de ver que la teoría neodarwinista no es capaz de explicar fenómenos muy relevantes de la vida –no es una teoría completa-, el caso principal para mí es el hecho de que no es perfectamente compatible con Gaia, al menos con una Gaia capaz de regular estados aptos para la vida y aún más incompatible lo es con una Gaia orgánica. Por tanto, hay que construir una teoría que fundamente el fenómeno Gaia y lo que observamos a escalas que van desde el ecosistema hasta el planeta. El neodarwinismo se ha tenido que hacer verdaderamente “rocambolesco” para tratar con entidades que sean mayores que el organismo.Segundo, parto de otras teorías que hunden sus raíces en la física: teoría general de sistemas,termodinámica de sistemas alejados del equilibrio, etc. para discutir que de nuevo el neodarwinismo no encaja bien en el puzzle construido por la nueva física, por lo que una nueva teoría biológica se hace necesaria.
Y el ejemplo que más me gusta, el redescubrimiento más importante que ha hecho la ciencia en los siglos XIX y XX es que vivimos en un universo evolutivo en el sentido que desde el Big-Bang se han creado estructuras cada vez más complejas, desde una sopa informe hasta –por ahora y que sepamos- Gaia, pasando por estrellas, planetas, bacterias, esponjas, insectos, delfines, termiteros, bosques tropicales… Y lo que aún es más importante, la aparición de sistemas complejos nos da la impresión de que es acelerada, es decir, que la aparición de la primera bacteria requirió más tiempo que la aparición de la primera esponja desde la primera bacteria, y la aparición del primer termitero requirió menos tiempo que la aparición de la primera esponja.Esto es un hecho observacional. Real. Científico.Por tanto, deberíamos tratar de explicarlo. Lo curioso es que la ciencia se empeña sistemáticamente en ignorar ¡el hecho más claro y fundamental de nuestro universo! El neodarwinismo ha hecho lo propio en su campo, es más, cuando se acorrala a un neodarwinista con la pregunta, termina diciendo que la complejidad se deriva de que es el único camino posible.Pero no explica ni porqué es un camino que se ha mostrado estable a lo largo de 4000 millones de años, ni tampoco porqué es un camino cuesta abajo (la evolución de lo complejo se acelera). Sencillamente, no puede explicar esa aceleración que se lee cuando vemos la historia de la aparición de los organismos más complejos de su momento histórico.
Hay que crear pues una nueva teoría. Mi libro hace el esfuerzo principal aquí.
6)En su opinión, ¿cuál sería la falla básica o el talón de Aquiles de la teoría sintética neo-darwinista?
Dos talones de Aquiles, uno pretender que el mecanismo de la selección natural lo explica todo –cuando no explica nada relevante en la evolución de lo complejo-. El otro talón es la “aleatoriedad”, las mutaciones, fuente última del cambio, deben ser aleatorias respecto a lo que se presenta a la selección natural. Esto es esencial en una teoría que hunde sus raíces en una visión mecanicista del mundo y que huye de cualquier sentido en la evolución. Los mismos bioquímicos están acumulando prueba tras prueba de que esto no es así. Un día, espero que cercano, pasará como con la caída del muro de Berlín, será casi de repente pero tras décadas de tensión. Después los científicos se preguntarán porqué no lo vieron antes cuando las pruebas en contra se llevaban acumulando durante décadas.
7)¿Qué opinión le merece la obra científica de Richard Dawkins, su concepción del Gen Egoísta y la influencia que su pensamiento ha tenido en los biólogos y científicos actuales?
Es el otro extremo respecto a mi teoría, el resto de las teorías científicas que conozco se meterían entre ambas. Reduccionismo frente a Holismo, Mecanicismo frente a Organicismo, y así uno a uno con cada paradigma. Obviamente creo que estoy mucho más cerca de la explicación correcta de la realidad, así que mi opinión es que Dawkins está totalmente equivocado.
Supe en carne viva de la influencia del “gen egoísta” al oír a un amigo mío, veterinario, que era el libro que más le había impactado y que más le gustaba como explicación para “casi todo”. En cierto sentido me pareció que sustituía a la Biblia.
Me temo que el neodarwinismo se hace fuerte con una visión tan radical, pero de éxito, como la de Dawkins, el “dawkinismo” les sirve para criticarlo y vestir al neodarwinismo con piel de cordero. Creo que muchos científicos no reflexionan sobre las consecuencias filosóficas (y políticas) que su ciencia tiene. Me temo que muchos viven en una especie de esquizofrenia en la que la cabeza y el corazón van por caminos muy diferentes. Creo que biólogos, ecólogos, naturalistas, médicos, etc., que además sean creyentes, no son conscientes plenamente de la contradicción entre sus dos creencias.
¿En qué nos basamos para ser ecologistas? ¿En la lucha por la supervivencia? Si el lince desaparece es la ley neodarwinista, el ser humano estuvo mejor adaptado y punto. Si nos descuidamos el neodarwinismo asfixia la moral.
El neodarwinismo fuera del ámbito de la explicación de la evolución da escalofríos (eugenesia, racismo…), pero si el ser humano solo es un producto de esa evolución ciega y competitiva no tenemos escapatoria: “el crecimiento de un gran negocio no es más que la supervivencia del más capacitado… solo es la manifestación de una ley de la naturaleza, una ley de Dios” (John D. Rockefeller). Es la frase más valiente y coherente que he oído desde la visión del neodarwinismo.
8)En su opinión, ¿a qué se debe la hegemonía científica actual del neo-darwinismo? ¿Por qué es tan difícil para sus seguidores reconocer las fallas de las que adolece esta teoría y considerar propuestas alternativas?
En ciencia, la hegemonía de una teoría se mantiene no siempre por los méritos científicos, sino porque encaja con lo que denominamos paradigmas, los presupuestos, la visión del mundo de los científicos que copan el “poder” del ámbito científico. En el caso del neodarwinismo la teoría es una pieza de un puzzle mayor que comprende a nuestra propia civilización: desde el punto de vista filosófico el materialismo, con sus visiones reduccionista y mecanicista. En lo religioso el relativismo, la religión solo en el ámbito privado y claramente separada de la ciencia. En lo político-económico el capitalismo, con sus libertad del individuo, competitividad y selección del mejor.
Y resulta muy difícil considerar otras propuestas precisamente porque el científico, como cualquier otra persona, tiene construido un mapa mental del mundo que comprende a la ciencia y a todo lo demás, cambiar la teoría neodarwinista puede suponer cambiar muchas otras piezas del mapa-puzzle, y para ello hace falta no sólo mucha paciencia, sino para un neodarwinista, muchísimo valor. Si además el poder político y económico se encuentran cómodos con tu teoría científica, más fácil es sentarse en el trono y más difícil derrocar al rey.
9)¿Es la teoría que usted propone compatible o incompatible con la religión, o con alguna concepción espiritual del ser humano? ¿O es su propuesta neutral sobre este tema? Pregunto esto, porque comúnmente el debate sobre el darwinismo se enmarca dentro de un contexto religioso, como si el motivo para afianzar el darwinismo sea acabar con la religión, o como si los críticos del darwinismo fuesen siempre motivados por creencias religiosas manifiestas o encubiertas.
La pregunta se justifica por sí misma, antes dije que el neodarwinismo es tan candente precisamente porque trata de responder a las mismas preguntas que muchas religiones y filosofías. No existe la neutralidad en la ciencia, el simple hecho de decir que la ciencia es neutral a mí ya me está indicando de qué pie cojea el que lo dice, cual es su sesgo.
Reconozco que mi posición, quizás por distinta al debate neodarwinismo versus religión, no sea del agrado ni de unos ni de otros.
Primero creo que es lícito que una persona religiosa pregunte y critique el neodarwinismo, pues sinceramente, no nos engañemos, el neodarwinismo no es compatible con una creencia religiosa.
Veamos cómo responde a las tres preguntas:
¿De dónde venimos? De una evolución aleatoria que por pura casualidad nos ha dado forma.¿Qué somos? Una máquina programada genéticamente bien adaptada a su entorno, si existimos es porque nuestro linaje compitió bien en el pasado. Si sobrevivimos es porque somos aptos frente a otros que lo son menos. Aquellos más aptos –mejores en este sentido- tendrán más descendencia.
¿A dónde vamos? A ningún sitio, como cualquier especie terminaremos desapareciendo sustituidos por otras especies en un baile aleatorio y sin propósito.
Desde el punto de vista filosófico y desde cualquier tipo de religiosidad, sencillamente: es repulsiva. La visión del mundo neodarwinista es la de la competencia con el fin de sobrevivir, de una lucha de todos contra todos, sin otro propósito que ese, sobrevivir. Pues en el fondo somos máquinas programadas para ello, y encima, nadie ha programado eso, simplemente surge de la aleatoriedad de nuestro mundo. Y si un dios ha diseñado unas leyes así, ¿qué clase de dios cruel diseña un mundo en el que la lucha, la competencia, la supervivencia del más apto para la lucha, en el que todo es un baile de muerte y destrucción, son las reglas de juego?
Un dios así me recuerda al Olimpo griego en sus peores tiempos.
He oído decir a neodarwinistas que su propósito es que nos alejemos de la visión antropocéntrica del mundo (otra constante en las religiones) y comparan a Darwin con Galileo en su lucha dialéctica contra la Iglesia. Pero al establecer que el único fin del individuo es sobrevivir en una lucha competitiva, y dejar descendencia, de nuevo, vuelve a caer en una visión antropocéntrica radical: el individuo se convierte en el centro de todo, y el individuo es el organismo, ni siquiera la especie.
¿A qué religión le puede gustar algo así?
En cuanto a mi teoría, la verdad es que no es compatible con las visiones antropocéntricas de la vida, para mí el centro de la vida es Gaia, no el ser humano, así que supongo que esto excluye a las religiones con dioses intervencionistas y centradas en el hombre. La teoría no es muy compatible con las grandes religiones monoteístas.
Pero tampoco con aquellas filosofías o religiones orientales que aunque mejor orientadas hacia el respeto de toda forma de vida, siguen pensando en que el culmen es el ser humano (por ejemplo, la Iluminación de Buda está reservada a ciertos hombres, pero ¿un escarabajo o Gaia pueden?).
Sin embargo, mi teoría sí es compatible con visiones religiosas o espirituales que trasciendan al ser humano. Es compatible con un dios creador del cosmos y unas leyes que lo rijan precisamente hacia un camino de “perfección”, Gaia sería el eslabón más alto que conocemos pero no tiene porqué ser el último, es más, lo lógico es que la evolución de nuestro universo no se pare en Gaia. El escarabajo no es el fin o propósito del universo, el ser humano tampoco, ni siquiera Gaia.
Y la teoría es mucho más humanista que el neodarwinismo pues el ser humano, mejor, la humanidad, sí que puede tener un papel importante en este universo, pero es un papel que exige pasar por una humildad extrema: no soy el propósito de nada, pero puedo ayudar a la creación de una Gaia más evolucionada (o por lo menos dejarla en paz).
El mapa-puzzle en el que encaja mi teoría es distinto al de las religiones clásicas y al de nuestra civilización occidental presente.Está todo por construir.
10)Además de su libro, ¿Existe alguna bibliografía o literatura básica que usted recomendaría a los jóvenes científicos, y al público general interesado en estas cuestiones, o que desee profundizar más al respecto?
Aconsejo dos libros más sobre Gaia, para ver el espectro que abarca la teoría: “Gaia toma cuerpo” de Tyler Volk (editorial Cátedra) y “Gaia: the practical science of planetary medicine” de Lovelock (editorial Oxford) y si se quiere en español, el primer libro de Lovelock: “Gaia: una nueva visión de la vida sobre la Tierra" (editorial Blume).
Para cuestiones sobre evolución de las especies, es imprescindible leer a Lynn Margulis y a su hijo en “Captando Genomas” (Kairós) o “The symbiotic planet” (Phoenix). Para otra crítica al darwinismo, con aportaciones además a la construcción de una nueva teoría de la evolución: “Pensando la evolución. Pensando la vida” de Máximo Sandín (ediciones crimentales). Su teoría y la mía son independientes (las elaboramos sin saber el uno del otro) pero con puntos esenciales en común.
11)Algo más que le gustaría agregar para finalizar la entrevista.
Sí, para un científico o un filósofo, no hay nada más excitante que descubrir que “está todo por construir”. Cuando te libras de una teoría como el neodarwinismo, con tantas implicaciones fuera de la biología, resulta que tienes que cimentar no sólo tu nueva teoría, sino que debes ir creando y cimentando mucho más. Es como si un día descubres en tu propia casa un armario, te metes en él y resulta que da a un mundo nuevo. Enterito para ti. Es maravilloso. La teoría Gaia orgánica son solo los primeros pasos en un mundo entero por descubrir. Invito al lector a explorarlo, en este mundo, sí que cabemos todos.